La vida nos enseña,que aunque todo puede ser un poco duro, hay que disfrutar de las cosas pequeñas.
Debemos poner nuestro granito de arena, y podremos mover montañas.
No todo es diversión y risas, también hay momentos crudos.
¿Recuerdas cuándo de pequeño temías llegar a sacar un suspenso? Y luego cuando, en el instituto nos lo ponían y llegabas temblando a casa por la riña que podrían echarte.
La vida está llena de notas, nadie saca ningún cero ni ningún diez.
Y la nota nos la ponemos nosotros, a la hora de actuar.
Vale,he de admitirlo,estoy loca, pero sin duda, es lo mejor que me a podido pasar en esta vida.
Soy una chica pequeña en un mundo demasiado grande.
No hay comentarios:
Publicar un comentario